La actuación arbitral de la Liga F sigue dando qué hablar jornada tras jornada. La nueva polémica tuvo lugar el pasado fin de semana en el Levante Las Planas – Villarreal. Un encuentro que estuvo marcado por el arbitraje de Elisabeth Calvo. Esta fue la colegiada principal, junto a Nahia Alonso y Haizea Castresan, asistentes, y Elena Contreras, la cuarta árbitra.
El partido terminó con 2-2 en el marcador. Tuvo de todo desde el minuto 39 de la primera parte hasta el final del encuentro. La colegiada mostró hasta siete cartulinas amarillas. Además expulsó al primer y al segundo entrenador de las locales y a la técnica del submarino amarillo. Además, ninguna de estas tres expulsiones estuvo recogida en el acta arbitral. Un error que posteriormente fue corregido.
Ferran Cabello: «Hago un llamamiento a la Liga F y a la RFEF, el arbitraje es muy deficiente»
A partir de la polémica que se vivió en el encuentro con las decisiones de la colegiada, el entrenador del Levante Las Planas, Ferran Cabello, mostró al acabar el partido su enfado e indignación con el arbitraje en general de la Liga F. El técnico local expresó a los micrófonos de RAC 1 lo siguiente: «Las árbitros, que son quienes deben permitir que la competición sea profesional, son las primeras que creo que no cumplen con los requisitos mínimos para poder arbitrar un partido de Primera División».
El partido dio un giro de 180 grados cuando Elisabeth Calvo pitó un penalti dudoso a favor de las visitantes en el minuto 39. Un penalti que lo transformaría el Villarreal para abrir el marcador. La decisión de la colegiada desembocó en la expulsión de Ferrán Cabello y Marc Ballester, el primer y el segundo entrenador del conjunto catalán. Ambos completamente en desacuerdo con Calvo.
A partir de ahí el control del partido se le fue de las manos a la colegiada. Una entrada de Claudia Iglesias, jugadora del Villarreal CFF, a Elena Julve, del Levante Las Planas, desató una tangana entre las jugadoras de ambos equipos. Esta se resolvió con dos tarjetas amarillas más. Antes de que terminara la primera mitad, la misma jugadora del submarino amarillo vio la segunda amarilla. Fue tras frenar un contraataque local. Sara Monforte, la entrenadora del conjunto visitante, también fue expulsada camino de los vestuarios.
Sin duda, un partido que será más recordado por la actuación arbitral que por el fútbol que se vio sobre el césped. El entrenador del Levante Las Planas siguió con su crítica sobre el arbitraje de la Liga F. «Hago un llamamiento a la liga y a la federación para que pongan una solución a un hecho que está perjudicando al buen juego de todos los equipos. El arbitraje creo que es muy deficiente, no sólo en este partido, sino en toda la temporada», sentenció.
Enfado de los clubes de la Liga F con las árbitras
No es la primera vez que uno o dos equipos se ven perjudicados por las actuaciones arbitrales durante un encuentro. La lluvia de críticas alrededor de la actuación de las árbitras continuó en el partido entre el Atlético de Madrid 2-1 Betis.
Francis Díaz, entrenador del conjunto bético, expresó su enfado con el arbitraje de la murciana Martínez Martínez durante el partido: «He visto las repeticiones y hay dos faltas clarísimas antes de los goles que no pitan. Hemos controlado lo controlable y te vas a casa con cara de tonto».
Por la misma línea van las declaraciones de Cristian Toro, el técnico del Sevilla FC, con respecto al arbitraje en lo que va de temporada. «Los arbitrajes están siendo muy duros con nosotras, hoy nos pitan un penalti en contra que era fuera del área, la semana pasada en un partido que estaba siendo anímicamente difícil nos pitan un penalti inexistente…»
Además, añade: «Creo que tenemos demasiadas expulsiones para lo agresivas que somos». Recordamos que el Sevilla FC es el equipo de la Liga F que tiene más tarjetas rojas en este primer tamo de temporada. Teresa Mérida, Nicoli, Diana Gómes han visto la tarjeta roja dentro del terreno de juego.
Fuera de él, fue expulsada en un partido Rosa Otermín tras ver la segunda amarilla por celebrar un gol e invadir el terreno de juego. Además, la jugadora sevillista Klara Chahynová estuvo sancionada durante cuatro partidos por dedicarle una palabra malsonante a la cuarta árbitra tras finalizar el encuentro ante el Sporting de Huelva.
El arbitraje de la Liga F y su profesionalización
La Finetwork Liga F, una competición profesional por primera vez de fútbol femenino, se ha visto salpicada por las polémicas arbitrales desde antes del inicio de esta. La competición tuvo que empezar una semana más tarde debido a la huelga que protagonizaron las árbitras y asistentes ya que pedían un sueldo acorde con la profesionalización de la competición.
Tras una semana de parón, en la que todas las árbitras y asistentes de la Liga F se concentraron para dar a conocer sus motivas de huelga en una rueda de prensa, finalmente se subió su sueldo. Un acuerdo que tuvo lugar el pasado 14 de septiembre entre la RFEF y la Liga F.
En dicho acuerdo, las arbitras pasaron a cobrar 25.000 euros al año y 16.000 en el caso de las asistentes para las próximas 6 temporadas. Esto supone de 300 euros a 1.666 por partido en el caso de las colegiadas y de 166 euros 1.006 en el caso de las asistentes de la Liga F. Un aumento considerable del sueldo en comparación con la temporada pasada y que levantó mucha polémica por lo alejadas que están estas cifras de la realidad del fútbol femenino.
Otra polémica en la que se ha visto envuelta la Liga F con respecto al arbitraje es debido al coste para los clubes de las tarjetas. La tarjeta amarilla pasó de 4 euros a 180 y las rojas 350€ en vez de los 9€ de la temporada anterior. Un coste que supone casi inalcanzable económicamente para muchos clubes de la competición.
Futuro incierto con el convenio colectivo de las jugadoras
Mientras las árbitras de la Liga F reclaman unas mejores condiciones económicas y sigue el curso de la competición, el convenio de fútbol femenino sigue en el aire. A pesar de ser una liga profesional, todavía no hay fecha para llegar a un acuerdo colectivo entre los representantes de los clubes y los sindicatos.
Recordamos que las jugadoras han sido muy claras asegurando que hasta que no se resuelva el tema arbitral a través del CSD, no estipularán una cifra. Precisamente, porque el arbitraje, puede llegar a suponer que algunos clubes tengan que abonar un coste casi cuatro veces superior a lo previsto. Por ahora, los clubes no están pagando a la espera de cómo se resuelva el conflicto del CSD y la RFEF.