No es habitual que el Real Betis Féminas juegue como local en algún sitio que no sea la Ciudad Deportiva Luis del Sol. Ha llamado la atención, por tanto, que el partido entre Real Betis y Real Madrid se haya disputado en el Estadio Felipe del Valle de San José de la Rinconada. Con independencia del escenario, lo que se ha llevado el protagonismo ha sido la victoria del Real Madrid sobre el Betis por 0-3. Para el conjunto verdiblanco, el resultado es otro nuevo golpe a su moral. El equipo no estaba hecho para sufrir tanto. Por lo que respecta al Real Madrid, las merengues han demostrado fiabilidad y seguridad y siguen creciendo partido a partido.
Tres mordiscos mortales
El Real Madrid saltó al campo con la aparente intención de presionar arriba, pero pronto fue el Betis el que agarró el balón e impuso su juego. La defensa bética, muy frágil en los primeros partidos de la temporada, se mostró rápida y coordinada. El Betis adelantó su línea de presión y, sin dejar que el Real Madrid mantuviera la pelota, buscó una y otra vez los espacios. Rosa Márquez y Ángela Sosa estuvieron sensacionales en esa tarea. El Real Madrid, sin embargo, ya tiene la impronta de los grandes. Probablemente no esperaba que el Betis fuera capaz de empujar tan bien como lo hizo, pero nunca le perdió la cara al partido. Con paciencia esperó, y su defensa, apoyada por unas soberbias Abelleira y Kaci, demostró que no se amilana con facilidad. Realmente, consiguió que la magnífica primera media hora del Betis fuera totalmente estéril.


El Betis dominó el mediocampo, pero no fue capaz de pisar el área rival con verdadero peligro ni una vez. Daba sensación de control lejos de Misa, pero sus jugadas eran desactivadas sin problema por la defensa madridista en cuanto el balón se acercaba al área. Cumplida media hora, cuando más ímpetu ponía el Betis en precisar jugadas de peligro, el Madrid, que se había mantenido paralizado en ataque, se levantó de improviso. Como si de una cobra se tratase, asestó tres mordiscos mortales al conjunto andaluz. Solo hicieron falta tres jugadas, tres zarpazos, gestados igual: robo en el medio campo, salida rápida y vertical, y golpe mortal desde el borde el área.
El Real Betis luchó hasta el final
El Betis acabó KO la primera parte y no empezó mucho mejor la segunda. De nuevo el Real Madrid comenzó jugando en el campo rival. Sin embargo, tuvo suerte el Betis, porque el Real Madrid decidió no hacer sangre. Durante el resto de la segunda parte el equipo de David Aznar se dedicó a esperar y a desmontar, sin aparentes problemas, los ataques béticos en el medio campo. Ni siquiera necesitó encerrarse atrás para defender. El Betis luchó hasta el final, demostrando un amor propio bastante acusado, pero con el paso de los minutos perdió la poca frescura física y anímica que le quedaba. Tras un último apretón bético, que buscó con ahínco al final el tanto del honor, el partido murió sin más goles.
Tres goles y contención madridista
El primer gol llegó a los 31 minutos. En una salida desde atrás del Betis, Kaci le robó el balón a Eva Llamas y marcó desde el borde del área (0-1). Siete minutos después, un pase filtrado de Ivana, que había vuelto a interceptar una salida bética, llegó a Cardona, que se plantó sola ante Gérard y no perdonó (0-2). En el minuto 45, Corredera se adelantó en el mediocampo y su despeje le cayó a Asllani, la defensa bética se durmió y la sueca la coló por el palo largo desde el borde del área (0-3).
Consecuencias para Real Betis y Real Madrid
El Betis jugó muy bien durante 30 minutos, pero no muerde arriba y eso se paga. El Madrid, en cambio, tiene un muro en defensa y demostró ser letal. Tras un comienzo de Liga dubitativo, el equipo de Aznar va a más y acabará muy alto. El Betis, por su parte, no logra frenar la sangría. Pier tiene ante si la complicada labor de levantar el ánimo de la plantilla. Su equipo ha mejorado en muchas de las facetas, pero está al borde de los puestos de descenso. La próxima semana no hay Liga y eso le vendrá bien a las sevillanas para tratar de regenerarse física y mentalmente.