El fútbol femenino volvió a San Sebastián. El Wolfsburgo se citaba con el FC Barcelona en las semifinales de esta atípica Women’s Champions League. Unas campeonas de Europa ante las finalistas de la última edición. Y el Barça demostró que la distancia con los mejores equipos del continente, que años atrás era más notable en el fútbol femenino, ha desaparecido. Las catalanas fueron mejores durante los noventa minutos y gozaron de las mejores ocasiones. Muchas de ellas, demasiado claras como para perdonar en semifinal. El Wolfsburgo no perdonó y, en una acción fortuita, lograron el gol que les sella el billete a la final.
El Barça domina sin gol
Los primeros cuarenta y cinco minutos se tiñeron de blaugrana en el Reale Arena de San Sebastián. El once orquestado por Lluís Cortes sorprendió a las bávaras desde los primeros compases del encuentro. Así lo demostraron Graham y Oshoala con dos ocasiones en los primeros diez minutos.
El ímpetu culé no decaería ni un instante y un centro desde la esquina acabaría con un penalti claro de Hendrich que la colegiada Kulcsár no señaló. El esférico impactaba en la mano de la defensora del conjunto alemán y la pelota se envenenó hasta que Abt palmeó de nuevo a córner. El Wolfsburgo intentó reaccionar al dominio de la escuadra catalana y Rolfö mandó un lanzamiento a las nubes, desaprovechando así el contraataque de las teutonas.
Pero de nuevo fue el Barça el conjunto que llevó el peso del balón. Otra vez, el peligro llegó de las botas de Oshoala y Graham. La nigeriana picó un esférico que se perdió por poco a la izquierda de la portería de Abt. Minutos más tarde sería Graham quien tendría el gol en sus botas. Tras bajar con la espuela un balón con música de Alexia, la noruega recortó desde la izquierda al interior del área – sentando por el camino a Janssen – y soltando un latigazo que se marchó muy cerca del poste diestro de la portería alemana.
En ambas ocasiones el Wolfsburgo buscó la réplica a través de Huth, pero apenas inquieto a Paños. La guardameta solventó sin problemas las escasas llegadas del cuadro alemán. Los primeros cuarenta y cinco minutos llegaban a su final, con un Barça que buscaba con ahínco su segunda final consecutiva pero sin el premio del gol.
Rolfö neutraliza el dominio
La segunda mitad comenzó de la misma manera que acabó la primera. El guion del partido parecía que lo seguía escribiendo el Barça. A pesar de un susto tras un despeje de Mapi que acabó envenenándose, fueron las culés las que pusieron las mejores ocasiones. Jenni filtró un pase de escándalo a la espalda de la defensa alemana y Graham, sola ante Abt, prefirió buscar un pase de la muerte a Oshoala. Sin embargo, sería la defensa germana la que despejaría el balón.
Antes de llegar al cuarto de hora llegaría el gol del Wolfsburgo, obra de Rolfö tras aprovechar un mal rechace de la zaga culé. Sin embargo, el varapalo no cambió la dinámica del encuentro. El Barça continuó buscando el gol y Mariona estuvo cerca tras recibir un centro al corazón del área. Con todo a su favor, la balear envió el balón por encima del larguero.
Parecía que la portería se hacía pequeña cada vez que el conjunto catalán se acercaba a los tres palos protegidos por Abt. Lo intentaron Jenni y Aitana. Ocasiones que pudieron haber acabado con el esférico en el fondo de la red y, sin embargo, los balones se perdían por las gradas del Reale Arena.
El Wolfsburgo, experimentado, cerró filas y dejó de conceder tantas llegadas. El Barça, agotado física y mentalmente después de ver cómo tantas ocasiones se habían ido al limbo, no pudo empatar el encuentro.
El gol del partido
A pesar del dominio del FC Barcelona, el premio del gol llegó para el Wolfsburgo. No sería hasta el minuto 57 cuando Huth colgó el esférico al área. Ni Mapi León ni Andrea Pereira consiguieron despejar el balón y comenzó el pinball. Pereira rechazó alto y Pajor probó una chilena. Esta salió defectuosa y el balón impacto sin fuerza en la rodilla de María León. Con el balón muerto en la frontal del área pequeña, Rolfö puso la puntera para superar a Paños. Esta acción puso en el marcador el 1-0 a favor del conjunto alemán.
Efectividad ante la inferioridad
El Wolfsburgo cumplió y ya es finalista de esta nueva edición de la Women’s Champions League. El conjunto alemán fue inferior ante un gran Barça al que solo le faltó el gol. Demasiado castigo para el conjunto de Lluís Cortes, que ponen punto y final a la temporada en un encuentro en el que merecieron más. Ahora, solo les queda esperar en este clima de incertidumbre que rodea el fútbol femenino en nuestro país. Las alemanas, por su parte, esperan rival y están a noventa minutos de ser campeonas. El fútbol femenino volverá el próximo 30 de agosto para darse cita con la gran final.