Con Ángel Villacampa al mando por segunda temporada, al Athletic Club le tocará exprimir nuevamente su cantera para hacer frente a numerosas e importantes bajas. Después de un inicio irregular marcado por las lesiones, la pasada temporada las leonas volvieron a hacerse fuertes en la élite del fútbol femenino español. La prematura finalización de la campaña hizo que acabaran en quinta posición, a tan solo dos puntos del Deportivo Abanca. Por delante tienen el reto de, al menos, igualar esa quinta posición de la que nunca han bajado en sus 18 temporadas en Primera División.
Un equipo histórico que cuenta con cinco Ligas en sus vitrinas y que tendrá que hacer nuevamente frente a los numerosos fichajes y refuerzos -nacionales e internacionales- del resto de equipos confiando en su cantera. Tan solo cuentan con dos nuevos nombres en sus altas, pero la perfecta armonía que demuestran año tras año entre juventud y veteranía serán claves para hacer del Athletic, una vez más, un equipo competitivo.
Bajas muy sensibles
Cumpliendo contrato, Ángel Villacampa volverá a dirigir al club rojiblanco. El técnico, campeón con el Atlético de Madrid por partida doble, es conocido por su exigencia en los entrenamientos y en el terreno de juego. El inicio fue complicado, ya que las ideas de los entrenamientos no terminaban de proyectarse en el terreno de juego. Pero Villacampa logró por fin que el Athletic mostrara un estilo de juego reconocible. Estilo de juego que se sostenía, en gran parte, gracias a la dupla formada en el centro del campo por Maite Oroz y Damaris Egurrola.
Maite Oroz ponía el reloj, y Damaris ponía el cerebro. Ambas piezas clave de un equipo que esta temporada tendrá que reinventarse sin las dos jugadoras que más minutos disputaron la temporada pasada. Oroz puso rumbo al Real Madrid, mientras que Egurrola aun no ha confirmado su destino. Son las dos bajas más duras a las que se enfrentan las rojiblancas, ya que pierden dos pilares fundamentales en el centro del campo.
También Ainhoa Tirapu se despide del Athletic. La que fuera capitana y portera del club durante 15 años colgó las botas al término de la temporada pasada. Experiencia y seguridad en la portería y liderazgo aportaban, entre otras cosas, Tirapu. También colgó las botas de forma prematura Ainhoa Álvarez, y sale en forma de cesión al Alavés Leia Zárate. La delantera no contó con muchos minutos con Villacampa.
A todas ellas se le suma la pérdida de un diamante en bruto. La jugadora procedente del Athletic B, Amaiur Sarriegi, a la que se le ofreció dinámica de primer equipo con ficha en el filial, decidió buscar nuevos objetivos y más minutos en el club rival; la Real Sociedad. Salida especialmente sensible teniendo en cuenta la rotura de ligamento que sufrió una de las revelaciones de la temporada pasada: Ane Azkona.
Pocas caras nuevas
Frente a estas numerosas bajas, el Athletic Club apenas se ha reforzado con dos incorporaciones nuevas. Una de ellas no es otra que Marta Unzué, que durante las dos últimas temporadas ya formó parte de la plantilla en calidad de cedida por el FC Barcelona y que este año ha firmado la renovación por el club bilbaíno hasta 2022. A ella se suma el regreso de Amaia Peña, guardameta que militó en el Athletic B en el 2014-2016 y que tras jugar cuatro años en los Pitt Panthers, club del fútbol femenino universitario estadounidense. La getxotarra refuerza así la portería tras la salida de Tirapu y se disputará el puesto con Andere Legina y especialmente con Andrea de la Nava.
Pero mucha cantera
A pesar de tan solo haber anunciado dos fichajes, lo cierto es que el Athletic Club también ha sabido realizar renovaciones de futuro. Ane Azkona, Oihane Hernández y Oihane Valdezate, tres de las jugadoras revelación de las rojiblancas la temporada pasada, han ampliado su relación con el Athletic Club hasta mínimo 2023, garantizando así goles, solidez defensiva y ofensiva en el centro del campo.
Además, la pretemporada también ha dejado ver caras de la cantera que podrían tener un hueco en el primer equipo llegado el momento. Naroa Uriarte, Nerea Nevado, Bibiane Schulze y Mariana Cerro completan la pretemporada a las órdenes de Ángel Villacampa, y a ellas hay que sumar a la prometedora Irene Ogiza, que la pasada campaña se rompió el ligamento cruzado frente al Deportivo Abanca.
De esta forma, el Athletic apelará a su identidad para seguir peleando en la élite con la base de la cantera y con jugadoras más que asentadas en el equipo y que son pilares indiscutibles en el club; las veteranas Erika Vázquez (una de las mayores goleadoras del fútbol femenino nacional) y Vanesa Gimbert, Garazi Murua, Nekane, Eunate… Todas ellas jugadoras con notable experiencia y que prometen mantener la competitividad hasta la final.
Experiencia internacional
No se puede entender el actual Athletic Club sin la joven delantera Lucía García, referente ofensivo del equipo y el máximo exponente internacional. Lucía, con una amplia trayectoria en las categorías inferiores de la Selección, fue una de las mejores jugadoras de la Selección absoluta en el pasado Mundial de Francia, donde demostró ser una futbolista llamada a tener mucho peso.
Su velocidad, su desborde y desequilibrio, y su facilidad para encontrar huecos hacen de ella el arma ofensiva principal del Athletic. Futbolista siempre comprometida por el club y que decidió renovar la pasada temporada por tres campañas más, será nuevamente la futbolista referente a seguir y en la que se depositan muchas esperanzas.
También Ainhoa Moraza, otras de las jugadoras asentadas en el club y que va en busca de su sexta campaña, tuvo presencia internacional en la pasada She Believes que disputó España y en la que ambas -Selección y futbolista- dejaron buena imagen. Lateral polivalente y uno de los comodines de Villacampa.
Objetivo: Top 5
El Athletic sueña a lo grande pese a encontrarse con limitaciones en una liga cada vez más competitiva. Confiando en el talento nacional vasco del fútbol femenino, las de Villacampa buscarán igualar al menos la quinta posición obtenida la temporada pasada. Nunca han bajado de ese puesto, y tan solo en la temporada 2005-06 lograron otra quinta plaza. En todas las anteriores ocasiones, no bajaron de la tercera plaza; 5 títulos, 2 subcampeonatos, y 6 terceras posiciones. Precisamente por tal dilatada experiencia, sería insensato infravalorar a un histórico Athletic que año tras año se mantiene en lo alto.
Además, la Copa de la Reina es siempre un objetivo en mente tras ser el título que se le resiste. A pesar de los títulos ligueros, la Copa se les resiste y han firmado el subcampeonato en dos ocasiones (2012, 2014). Este año volverán a tener una nueva oportunidad, ya que están a esperas de que la Copa de la pasada temporada se reanude. Clasificadas en semifinales, las rojiblancas buscarán frente a un renovado, reforzado y temible EDF Logroño el pase a una final en la que se enfrentaría al vencedor del FC Barcelona-Sevilla FC. Pero mientras la RFEF se pronuncia, las de Villacampa siguen su preparación para lo que será su decimonovena temporada en la máxima categoría del fútbol femenino español.