El Real Betis Féminas regresó a San José de la Rinconada a jugar como local en el Estadio Municipal Felipe del Valle. Su partido ante el Levante UD cerró la jornada 11 de la Primera Iberdrola. La tarde no se presentó demasiado fría, pero la noche cayó pronto sobre las jugadoras y sobre las gradas semivacías del complejo deportivo rinconero. Pese a que cada uno de los dos equipos juega en la actualidad por objetivos distintos, los dos saltaron al césped conocedores de todos los resultados de la jornada. Eso añadió un plus de presión a las jugadoras. Las béticas empezaron el partido sabiendo que ya estaban en puestos de descenso. Las granotas, por su parte, tienen dos partidos menos que la mayoría de sus rivales, pero salieron del vestuario a ocho puntos del tercer puesto, que es el primero que este año da acceso a Europa. Ni unas ni otras podían permitirse un traspiés. Al final, el 0-2 favorable al Levante las acerca arriba y hunde un poco más al Betis.
La primera parte se jugó en campo bético
Pier comentó tras el partido del pasado fin de semana que sabe lo que puede dar el Betis como equipo. Hoy, con la idea de minimizar los puntos débiles de las suyas, modificó su planteamiento para intentar resolver los problemas defensivos béticos. En consecuencia, el Betis salió con las líneas muy juntas atrás, jugando con un puntito más de intensidad y sin arriesgar. El Levante, por tanto, se encontró con la posesión de la pelota y con la mayor parte del campo a su disposición, cedido por el Real Betis. Durante gran parte de la primera parte su línea defensiva pudo jugar en campo bético y Paraluta permaneció inédita. En contrapartida, el Betis no corrió demasiados riesgos atrás. No obstante, las jugadoras levantinistas tienen mucha calidad y a pesar de todo tuvieron sus oportunidades. Gracias a eso Méline pudo demostrar que es una portera de garantías. Nada pudo hacer, sin embargo, en la jugada del gol, que llegó en uno de los acercamientos del Levante por banda derecha, donde Alharilla y Eva Navarro brillaron especialmente. Tantas oportunidades tuvieron las granotas para tocar la pelota buscando huecos, que al final apareció uno y no lo desaprovechó Esther. La buena noticia para el Betis es que sus jugadoras no se descompusieron e incluso se acercaron algo al área rival, aunque de manera estéril.


Más verticalidad en Real Betis y Levante UD
Pier introdujo cambios en el descanso, ya que no le quedaba otra que estirar a su equipo. Gracias a ello, sus jugadoras dieron un paso adelante, pero antes de que pudieran ni siquiera crear verdadero peligro Esther ya había marcado el segundo tanto. Paradójicamente, el nuevo gol en contra espoleó a las béticas, que durante toda la segunda parte llegaron a comprobar varias veces que Paraluta estaba jugando. Las verdiblancas no bajaron la intensidad. Pese a que no marcaron, al menos pelearon y fueron más verticales en ataque. Sin embargo, jugaron con más corazón que cabeza. El Levante, por su parte, llevaba dos goles de ventaja y se limitó a contener los acercamientos béticos, así como a buscar contraataques. El equipo de Maria Pry, como los grandes, sabe jugar a varias velocidades. En la primera parte lo hizo tocando por todo el campo y en la segunda le dio velocidad al juego, sin tener tanto el esférico y sin llegar a sufrir atrás.
Goles del Real Betis y Levante UD
El primer gol llegó tras una jugada por la derecha de Eva Navarro, que centró al área, donde Esther se adelantó a su marca y empujó el balón con la pierna izquierda (0-1, minuto 35). A los siete minutos de la segunda parte, Esther controló en el área un pase de Rocío Gálvez y volvió a anotar (0-2, minuto 52).
Conclusión
El Levante tropezó ante el Real Madrid, pero el equipo de María Pry no está hecho para rondar la zona media de la tabla. Esther se encuentra en estado de gracia y mientas brillen jugadoras como Zornoza, Alharilla, Rocío Gálvez o Eva Navarro, como hicieron hoy, la afición granota puede estar tranquila. Con respecto al Betis, se ha hundido en las últimas cinco jornadas y vive presa de la ansiedad y el desánimo. La única coartada a la que Pier puede ya agarrarse es la de que en cuatro de esos cinco partidos ha jugado contra el Atlético de Madrid, el Real Madrid, el Granadilla y el Levante. Todos ellos disputan otra liga. El rival del próximo domingo, no. En efecto, el Betis está en descenso y contra el Logroño, que es colista, ya no habrá excusas.