La COVID-19 no le da tregua a nadie y ha provocado la suspensión de dos competiciones. El Mundial femenino sub-17 de la India y el sub-20 de Costa Rica. Una generación de campeonas de la selección española femenina, que no podrá intentar repetir la gesta.
Ya habían sido aplazadas, tras el azote de la primera ola del coronavirus en el mundo. La idea principal era que se pasase de jugar en noviembre y agosto de este año, a hacerlo en febrero y marzo de 2021. Pero la FIFA se lo ha tenido que replantear y después de meditarlo, se tomó la decisión de suspenderlas, por varios motivos.
La selección española femenina, un grupo campeón
La rojita conoce lo que es ganar una competición de alto nivel. Ya se hicieron con el trofeo de campeonas en el Mundial sub-17 de Uruguay. No fue fácil y el equipo tuvo que sobreponerse a varias situaciones, entre ellas, el abandono de la concentración de Ainhoa Marín, por lesión o el empate ante Colombia en la primera fase.
Pero lo hicieron juntas y demostraron ser un grupo unido. Un equipo que podía con todo y que además, jugaba de maravilla, con un gusto por el trato del balón exquisito. Cumplieron el sueño de cualquier futbolista y se abrieron paso de la manera más brillante.
No tendrán otra oportunidad
Solo unas pocas podrán disputar el próximo Mundial, porque por edad, son muchas las que se quedan fuera. No podrán estar algunas de las jugadoras icónicas de aquel campeonato en 2018, como por ejemplo Eva Navarro, Nerea Nevado o las ya mencionadas Claudia Pina y Cata Coll.