Este martes, la Selección Española femenina selló su billete para el Mundial de 2023. La selección irá a Australia y Nueva Zelanda para disputar su tercer mundial en la historia y de forma consecutiva.
España ha logrado la clasificación después de ganar por 0-2 a Escocia gracias a un doblete de Jenni Hermoso. La jugadora del Barça marcó el primero de penalti en la primera mitad y tuvo que esperar hasta el descuento del final del partido para marcar el segundo, después de una genialidad de Alexia.
Con este encuentro la Selección española femenina sella una fase de clasificación histórica. No solo por lo logrado sino también por el proceso. La selección ha ganado todos los partidos de la fase de la clasificación algunos con goleada como el 12-0 a Islas Feroe o el 8-0 a Escocia. Precisamente las escocesas son las únicas que han intentado aguantar el ritmo a las españolas, sin ningún éxito. Además la selección ha marcado 45 goles y en cambio no ha recibido ninguno en toda la fase de clasificación.
Es todo un logro histórico que dejará marcado el crecimiento del fútbol femenino español en los últimos años.
Un paseo ilusionante pero amargo en los Mundiales
La selección española femenina se había clasificado solo dos veces para la copa del mundo. La primera vez fue en 2015, en el Mundial de Canadá. La selección afrontaba ese reto con la ilusión de la primera vez, pero también con la abruma de jugar en uno de los países donde más se sigue el fútbol femenino.
Esa selección estaba liderada por Vero Boquete, acostumbrada ya a jugar en grandes escenarios como la final de la Champions. Tenía que liderar a la joven generación de Alexia, Virginia, Amanda etc. que no habían salido de una liga española muy pobre. España solamente logró un empate frente a Costa Rica por 1-1. Y se despidió de su primera experiencia en la fase de grupos.
La segunda vez ya fue diferente para la selección española femenina. Ya habían tenido su primera toma de contacto y grandes clubes como el Barça y el Atlético habían apostado muy fuerte por su sección femenina. Todo esto hizo crecer el nivel de la selección, que ya iba con otro aire al evento Mundial. Esta vez se celebraba en Francia, y España no tenía un grupo fácil.
Se debía medir a una de las favoritas, Alemania. Así que debía jugarse la segunda plaza contra China, toda una potencia en Asia. La segunda plaza llegó, y en su segunda participación en un Mundial, España se clasificaba por primera vez a octavos de final. Eso si, si antes se había enfrentado a una de las favoritas, ahora se debía enfrentar a LAS favoritas, Estados Unidos.
La selección española plantó cara, no se achantó a las tetracampeonas. Pero dos penaltis, algo dudosos, dieron la posibilidad a Estados Unidos de pasar de ronda y seguir dando pasos hacia su quinto Mundial. Ahora España afronta un tercer Mundial, y al igual que pasó entre 2015 y 2019, muchas jugadoras se mantienen, pero el nivel ha cambiado muchísimo.
El crecimiento del fútbol femenino español
Desde esos Mundiales de 2015 y 2019 hasta ahora, el fútbol femenino español ha crecido una barbaridad. España ha pasado de ser un país secundario en estos términos a ser una de las mayores potencias mundiales. Capaces de plantar cara a cualquier equipo. Este crecimiento no solo se ve en la Selección, también en los equipos y en las individualidades.
El equipo de la Primera Iberdrola que mas ha despuntado a nivel internacional ha sido claramente el FC Barcelona. Precisamente en 2015 se profesionalizó la sección y desde entonces han llegado grandes nombres internacionales, han llegado a dos finales de Europa, han ganado una Champions.
Y no solo el rendimiento del equipo, también el seguimiento de la afición. Rompiendo récords, y estigmas, como el de asistencia en un partido de fútbol femenino. Y ya se verá que pasará el 22 de Abril frente al Wolfsburgo.
También a nivel individual ha crecido mucho. Algunas jugadoras actuales estaban en Canadá 2015, pero hay otras que se han retirado y por ellas han llegado nuevas estrellas. Jugadoras como Athenea, Pina, Nerea, Misa, Amaiur… Jugadoras que son presente y futuro de la selección. Y tienen que llevar la a otro nivel. Además de jugadoras que en estos años se han asentado como unas de las mejores jugadoras del mundo, como Alexia, Aitana o Jennifer.
Para estas últimas, no va a ser su primer Mundial, pero en estos cuatro años el crecimiento que han tenido ha sido brutal. Al igual que el de toda la selección española femenina. Y seguramente crezca todavía aún más de aquí a un año. Este verano hay la otra gran competición internacional, la Eurocopa. Que podría avisarnos de que algunos sueños no son tan descabellados como parecen.