La selección femenina estadounidense de fútbol consigue ganar el pleito que mantenían por la igualdad salarial con los hombres. Las jugadoras del combinado nacional, serán compensadas por la Federación con 24 millones de dólares y recibirán el mismo salario que los hombres por sus partidos internacionales.
Acuerdo histórico para la selección femenina de fútbol
Desde ayer se alcanzó un acuerdo de compensación millonario con las jugadoras por haber recibido de forma estructural menos apoyo y dinero que sus compañeros. La organización pagará la suma total de 24 millones de dólares (21 millones de euros), de los cuales 22 se distribuirán entre las jugadoras. Los dos millones restantes serán destinados para ayudas a las jugadoras, cuando estas se retiren de la práctica del deporte profesional, o iniciativas benéficas relacionadas con la igualdad en el fútbol.
La Federación y las jugadoras han emitido un comunicado conjunto en redes sociales para dar los detalles de toda la operación. “Llegar a este día no ha sido fácil. Las jugadoras del equipo nacional femenino de Estados Unidos han alcanzado un triunfo sin precedentes mientras trabajaban por la igualdad de salario para ellas y las futuras atletas. Hoy, reconocemos el legado de las líderes del equipo que ayudaron a hacer posible este día, además de a las mujeres y niñas que las seguirán. Juntos, les dedicamos este momento”, explica el texto. La Federación también se ha comprometido a asegurar el pago igualitario entre hombres y mujeres de la selección a partir de este momento.
Dos demandas en tres años por discriminación salarial
La negociación y las quejas se empezaron a promover en 2016 con una queja que cinco jugadoras de la selección presentaron ante la Comisión de Oportunidades e Igualdad por discriminación salarial. Las cinco futbolistas implicadas eran: Megan Rapinoe, Alex Morgan, Carli Lloyd, Becky Sauerbrunn y Hope Solo. Tres años más tarde, hasta 28 jugadoras de la selección denunciaron a la Federación por los mismos motivos en un tribunal federal de California. Las jugadoras denunciaban que la Federación pagaba 5.000 dólares, unos 4.400 euros, a los hombres por cada partido disputado. En el caso de las mujeres, solo cobraban si ganaban a algún combinado del top 10 de los puestos FIFA.
“Obviamente no se puede volver atrás y deshacer las injusticias a la que nos hemos enfrentado, pero la única justicia que surge de esto es que sabemos que nunca más puede volver a suceder”, así lo valoraba Rapinoe con lo conseguido ayer como “un gran día”.
Irregularidad e injusticia para el fútbol femenino
Si miramos el organigrama salarial, la FIFA pagaba una prima en 2018 a los jugadores masculinos franceses de más de 32 millones de euros por la conquista del mundial. Una cifra que no es comparable con lo conseguido por las jugadores del país norteamericano que solo percibieron 3,4 millones en 2019.
Pero no es el único caso, ya que los jugadores del equipo nacional masculino de Estados Unidos eliminados en octavos de final del Mundial 2014, habían recibido 4,5 millones de euros mientras que sus compañeras femeninas solo habían recibido 1,45 millones por ganar su competición. Recordemos que la selección femenina de fútbol estadounidense tiene en su palmarés hasta cuatro Mundiales (1991, 1999, 2015 y 2019) y otros tantos oros olímpicos.
Justicia para el fútbol femenino
La demanda del equipo femenino fue desestimada por un juez en mayo de 2020. La U.S. Soccer declaraba que el equipo femenino había recibido más compensación que el equipo masculino durante la última década. Además, se consideraba que no había ningún fundamento para conseguir mejoras salariales a través de los tribunales. Aún así, las jugadoras no cesaron de su causa y decidieron recurrir la sentencia en un proceso que ha llegado hasta el día de hoy.