Natalia Arroyo tan solo ha necesitado unos pocos meses para que su idea de juego cale entre las integrantes de la plantilla donostiarra. La Real Sociedad, al igual que el resto de los equipos de la Primera Iberdrola ha vivido una pretemporada atípica y cargada de incertidumbre. Sin embargo, la entrenadora de Esplugues de Llobregat ha conseguido confeccionar un equipo sólido que ya ha conseguido alzar su primer título.
La Euskal Herriko Kopa que el equipo de San Sebastián ha levantado ante su rival más directo, el Athletic Club, ha servido para poner el broche de oro a una pretemporada tan extraña como eficiente.
La Real, en buenas manos
Gran parte de responsabilidad de que la Real Sociedad conquistase el trofeo la tiene Quiñones. La guardameta internacional de 23 años sujetó al equipo con el empate a cero en el marcador y desbarató las llegadas del cuadro rojiblanco. Especialmente bueno fue el vuelo de la guardameta en el descuento para mandar a córner un latigazo de Valdezate desde 25 metros. Además, supo culminar su actuación poniéndole la guinda al pastel y deteniendo el penalti definitivo. Era el decimoquinto cuando adivinó la intención de Eunate y sirvió en bandeja de oro una Kopa que confirmó Baños anotando la última pena máxima.
La guardameta de Hondarribia quiere pasar página y olvidar la anterior campaña. Una temporada marcada por su lesión de escafoides a principios de la misma y que acabó prematuramente por culpa de la pandemia. Sun ha regresado bajo palos en plena forma y todo apunta a que será la portera titular de la Real Sociedad en esta nueva temporada en la Primera Iberdrola.
Todos los exámenes superados
La pandemia ha imposibilitado que la Real Sociedad pueda disputar todos los partidos de pretemporada que desearía. Por ello, Natalia Arroyo ha tenido que buscar fórmulas para saciar esa sed de competición. La más habitual, partidos entre las integrantes de la plantilla para minimizar riesgos.
No obstante, a parte de la final de Kopa ante el Athletic Club, también se han enfrentado en dos ocasiones a Osasuna. En el primer encuentro amistoso, a mediados de septiembre, la Real Sociedad se impuso con un contundente 3-0 en las instalaciones de Zubieta con goles de Gemma Gili, Mirari y Manu Lareo. Txuri-urdines y rojillas se volvieron a ver las caras en las semifinales de la Euskal Herriko Kopa. Las jugadoras blanquiazules no permitieron la revancha y se impusieron por 2-0.
La Kopa cambia de dueñas
La Euskal Herriko Kopa ha cumplido diez años en esta edición. Athletic Club y Real Sociedad se repartieron las dos primeras ediciones. No obstante, a partir de 2013, el Athletic Club inició una hegemonía que duró hasta 2018, ganándole las seis finales a las txuri-urdines con resultados dolorosos como los 3-0 de las temporadas 2016 y 2017 o el 5-1 de la temporada 2018. El palmarés se repartía en siete trofeos para el cuadro bilbaíno y solo uno para las de San Sebastián.
Sin embargo, el equipo de Natalia Arroyo ha confirmado el cambio de guion que se comenzó a escribir en la anterior copa de Euskal Herria. En 2019, la Real Sociedad ganó por 3-0 al Athletic Club y este año ha vuelto a superar al equipo de Villacampa en los penaltis. No obstante, a pesar del empate sin goles en el marcador, el conjunto de la ex seleccionadora catalana fue notablemente superior.
Regresa la Primera Iberdrola
Se acabaron las dudas, la incertidumbre y los mensajes cruzados. La Primera Iberdrola arrancará el próximo fin de semana y se pone fin al verdadero culebrón del verano. Los equipos se verán las caras bajo estrictas medidas de seguridad con el fin de evitar contagios y minimizar riesgos.
No obstante, las jugadoras de Natalia Arroyo deberán esperar una semana más para empezar la competición puesto que el encuentro frente al Rayo Vallecano está suspendido. Así pues, el balón echará a rodar para ellas en la jornada dos, cuando se enfrentarán al Deportivo Abanca en la Ciudad Deportiva de Abegondo.