La jornada 8 de la Primera Iberdrola enfrentó a Rayo Vallecano y Sevilla FC en la Ciudad Deportiva de las de Vallecas. Ambos conjuntos fueron con la intención de hacerse con los tres puntos, aunque eran las locales quienes acusaban mayor ansiedad por hacerse con la victoria. El Rayo necesitaba abandonar el farolillo rojo cuanto antes y estudió muy bien a su rival. Por su parte, el Sevilla FC quería seguir escalando puestos en la clasificación. Aunque las de Cristian Toro comenzaron con mayor dominio, no lograron la clarividencia necesaria como para anotar en la primera. También fue culpable de ello el planteamiento del conjunto local, que supo leer muy bien a sus rivales y estuvo muy atento a las coberturas. El partido entre sevillistas y rayistas no fue el más intenso de la jornada, no pasaron demasiadas cosas. La gran protagonista fue la lluvia, sobre todo en la segunda mitad. Sin embargo, el Rayo se hizo con tres puntos vitales para seguir vivo en la categoría.
Primera mitad espesa
Los primeros 45 minutos de partido estuvieron marcados por ser muy espesos para ambos conjuntos. Hubo muy pocas ocasiones claras de peligro. Sí bien es cierto que en posesión ganó el Sevilla FC, el Rayo estuvo muy bien plantado para presionar y taponar. Hubo algunas imprecisiones por parte de uno y otro equipo. Errores que provocaron alguna ocasión más clara, pero tanto Noelia Ramos por parte sevillista, como Larqué para las locales estuvieron muy atentas para evitar el gol. De ese modo, el partido marchó al descanso con un 0-0 en el luminoso. También con un gran desgaste sevillista, que vieron fastidiado su ataque por la presión del Rayo.
Mejoría rayista en la segunda
En la segunda mitad fueron las rayistas quienes se hicieron con la posesión del esférico. En esta mitad el Sevilla FC acusó mayor desgaste y ansiedad, lo que afectó a su clarividencia. Sin embargo, en general, y salvo los últimos minutos, el partido no gozó de demasiada intensidad. No se vio mucha alegría en los ataques y sí se notó a un Sevilla FC más espeso de lo habitual, que no supo hacer frente a la solidez defensiva del Rayo Vallecano. Toni Payne se notaba cada vez más desesperada y nerviosa y Rosa Otermín fue la más destacada del partido en cuanto a ataque sevillista. Además, nada más comenzar, Noelia Ramos se vio sorprendida por varias atacantes locales en su área, pudo despejar un tiro, y una defensa sevillista rechazó otro disparo. Millene y Camila Sáez, junto a Larqué, fueron los nombres más destacables del conjunto de Vallecas. Pero en el tercer intento el Rayo Vallecano anotó el primero. A partir de ahí, se vivieron unos minutos similares a los del primer periodo.
Un gol para seguir vivas en Primera Iberdrola
El gol del Rayo Vallecano llegó en el mejor momento y no solo atendiendo solo a los noventa minutos que dura un partido. Es cierto que el 1-0 vino al poco de comenzar la primera mitad, algo que hizo mermar y afectó psicológicamente al conjunto local, pero supuso algo más para las rayistas. Noelia Ramos se vio sorprendida por varias atacantes locales y tras tres remates llegó el tanto de Millene, que lo celebró con rabia. Después de un rechace y un despeje sevillista el esférico se coló por el palo corto. Y Vallecas fue una fiesta: suponía tener la posibilidad de conseguir los primeros tres puntos de la temporada y seguir soñando por mantener la categoría.
Situación diferente en Primera Iberdrola
El conjunto dirigido por Cristian Toro venía con muy buenas sensaciones en la categoría, todo lo contrario al Rayo Vallecano. Durante el primer tiempo el Sevilla FC pudo intentar anotar algún gol y se hizo con la posesión del esférico. Sin embargo, con el pasar de los minutos la desesperación se iba a haciendo más notoria. Parece que los cambios llegaron un poco tarde. El Rayo, por su parte, hizo el partido que tenía planteado hacer: fastidiar el ataque sevillista y tratar de sorprender a las contras. La presión ejercida fue la óptima: consiguió generar ansiedad y nerviosismo en algunas futbolistas como Toni Payne. Al final, un gol le dio la victoria al Rayo Vallecano. En Vallecas se celebró con furia: primera victoria de la temporada y abandono del farolillo rojo. El último puesto de la Primera Iberdrola es ahora para el Villarreal CF.