Las competiciones deportivas de ámbito estatal que no se consideran profesionales ya tienen un protocolo para prevenir contagios de COVID-19 en el retorno a la actividad. Después de dos semanas de negociaciones el Consejo Superior de Deportes (CDS) ha llegado a un acuerdo con los demás estamentos deportivos implicados. Ello supone que habrá un documento que proporcione la seguridad sanitaria y jurídica necesaria para la vuelta de las competiciones en deportes como el fútbol femenino.
Falta de consenso hasta el martes
El pasado martes día 9 de septiembre desde el CDS se comunicó que no se había logrado aún un consenso entre todas las partes implicadas a la hora de fijar un texto único. En ese momento, la única norma de carácter estatal en vigor, relativa al desarrollo de actividades deportivas en tiempos de pandemia, era el protocolo del 3 de mayo que regulaba como debían desarrollarse las ligas profesionales.
El principal escollo en las negociaciones era la falta de acuerdo a la hora de regular la realización de controles mediante test PCR o serológicos. La cuestión de la presencia de público en los recintos deportivos era otro asunto sobre la que tampoco había unanimidad.
Acuerdo en la noche del miércoles
Finalmente, durante la tarde del miércoles todas las partes implicadas consensuaron un texto completo que posibilitará la vuelta de las competiciones oficiales de ámbito estatal y de carácter no profesional. De esta forma, deportes como el fútbol femenino han recibido por fin un impulso que les permitirá comenzar la presente temporada en breve.
El objetivo del protocolo es establecer unas bases mínimas comunes de tipo sanitario y de ámbito operativo. El mismo, además de establecer los aspectos generales, trata de fijar unas regulaciones básicas a tener en cuenta en temas como los entrenamientos, los desplazamientos, el uso de los espacios deportivos, la presencia de público, las medidas de control y la actuación en caso de que aparezca un positivo durante el desarrollo de una competición.
Reconocimientos médicos previos a la competición
Con respecto a las pretensiones relativas a la realización de los test, estas se han logrado consensuar. Tendrán lugar al iniciarse los entrenamientos de pretemporada, o bien 72 horas antes del inicio de las competiciones. Aspectos como el tipo de prueba a realizar, su financiación, si se debe realizar más veces con posterioridad o si se deben incluir pruebas aleatorias no anunciadas, serán determinados con criterios sanitarios, en el marco de los mecanismos existentes de coordinación con las CCAA.
Asistencia de público
En el protocolo la asistencia controlada y gradual de público dependerá de las CCAA. Serán estas, por tanto, las que tendrán que adoptar las medidas necesarias para garantizar que el desarrollo de las competiciones se realice en las mejores condiciones posibles de seguridad sanitaria. De esa forma, se establece que la implantación del protocolo variará en función del lugar donde se encuentren los deportistas.
En cualquier caso, el CDS ha fijado el número máximo de personas que podrán asistir a los recintos. Serán 500 para las instalaciones cubiertas y 1.000 para las que son al aire libre. Ello, sin perjuicio de que se respeten los requisitos de carácter general establecidos por las autoridades competentes.
Medidas para evitar contagios
A la vez que se establecen los puntos más conflictivos, en el protocolo se reflejan también las medidas que, en cada caso y en cada lugar, se habrán de tomar para combatir el virus. En ese sentido, se intentan detallar, por ejemplo, las medidas generales a adoptar en el caso de los desplazamientos. También el proceso de uso y limpieza de las instalaciones deportivas. El distanciamiento social, el uso de mascarillas y de gel hidroalcohólico, así como las personas que en cada circunstancia podrán o no estar presentes, también se fijan en el acuerdo.
Protocolo propio de cada federación
Aparte de todo lo comentado, cada federación deportiva podrá desarrollar sus propios protocolos de refuerzo. En ellos se verá reflejado lo establecido en el protocolo general, así como las especificaciones particulares que requiera cada disciplina. El CSD será el encargado de validar esos protocolos de refuerzo.
Protocolo subsidiario a otras normativas
Se establece también que el protocolo estará sujeto a cualquier normativa que pueda dictar tanto el Gobierno central como las CCAA. En todo caso, el protocolo también debe estar subordinado a los criterios que puedan dictar puntualmente las autoridades locales.
Revisión del protocolo
Por último, las autoridades asumen que los cambios en las condiciones de la pandemia en España obligarán a revisar y adaptar periódicamente lo establecido. Pese a esto, el hecho de que los deportistas puedan contar ya con un documento marco que establezca las medidas generales a adoptar es un primer paso fundamental para la reanudación de las competiciones. Esto es algo que las deportistas de disciplinas como el fútbol femenino venían solicitando de manera reiterada desde hace semanas.