Todos los equipos españoles de fútbol femenino de la Primera Iberdrola están viviendo un inicio de temporada muy complicado, pero el Rayo Vallecano lidera el ranking de conjuntos con dificultades. A los de Vallecas les queda menos de una semana para terminar de confeccionar su plantilla.
En efecto, la sección femenina del club madrileño además de sufrir los problemas externos derivados de la pandemia de COVID-19 y del papel secundario que la RFEF suele otorgar al fútbol femenino, ha visto como sus propios dirigentes retrasaban durante semanas el inicio de la pretemporada y congelaban la configuración de la plantilla. Por fortuna, el inicio del campeonato ya tiene fecha y se ha fijado también un protocolo sanitario que permitirá iniciar las competiciones con seguridad. Gracias a eso las jugadoras del Rayo han podido volver a los entrenamientos. El problema ahora, para los responsables del conjunto franjirrojo, es que prácticamente se ha agotado el plazo para fichar y la plantilla está a medio hacer.
Inicio de la pretemporada
Dejando a un lado al Rayo, el Sporting de Huelva fue el último equipo de la Primera Iberdrola que reinició su actividad. Las onubenses volvieron al trabajo el 3 de agosto, cuando aún se pensaba que la liga empezaría el 5 de septiembre. Los dirigentes vallecanos, por su parte, decidieron no autorizar el inicio de la pretemporada, fijado en origen para el 20 de julio, y manifestaron su intención de mantener la parálisis hasta que estuvieran establecidos los protocolos sanitarios. El exceso de celo bloqueó la vuelta al trabajo de las jugadoras que aún seguían en la plantilla, así como la remodelación de esta. De manera paralela, fue destituido Juanma Barroso, director de cantera y de fútbol femenino rayista, por sus desavenencias con la decisión tomada por el club.
Tras un largo periodo de espera la RFEF fijó la fecha de inicio de la liga para el fin de semana del 18 de octubre, aunque abrió la puerta a que se iniciase quince días antes. Finalmente, el 9 de septiembre se confirmó el protocolo y el 14 de septiembre se adelantó el principio liguero al 4 de octubre. Un día después las jugadoras del Rayo Vallecano pudieron comenzar la pretemporada, tras someterse a las pruebas PCR. En ese momento, la plantilla estaba compuesta tan solo por doce futbolistas.


Primeros pasos para la configuración de la plantilla
Dadas las circunstancias, el Rayo Vallecano fue el gran interesado en que el inicio de la liga se retrasase a finales de octubre. Para lograr salvar ese nuevo bache al equipo madrileño se le va a permitir aplazar sus dos primeros partidos de liga y empezar a jugar el fin de semana del 18.
Una vez resuelto ese escollo, los responsables del Rayo tendrán aún que afrontar un cúmulo de problemas: el plazo para incorporar jugadoras acaba el próximo 5 de octubre, su presupuesto es limitado y la plantilla aún está en cuadro. En agosto el club se limitó a renovar algunas jugadoras. Así pues, amplió su vinculación con Andújar, Iris, Expósito, Patri Larqué, Camila Sáez y Bulatovic, así como con las capitanas Cristina Auñón y Pilar García (Sheila García y Paula Fernández ya estaban renovadas desde abril). También confirmó al entrenador Carlos Santiso. Sus dos únicas incorporaciones fueron las de Zaira Flores y Teresa Morató, procedentes del Barcelona B. Durante ese tiempo no pudo impedir que fichajes que ya tenía apalabrados decidieran no firmar finalmente con el Rayo. Partiendo de esa base, con la vuelta a los entrenamientos la secretaría técnica del club se ha puesto a trabajar a marchas forzadas.
Un Rayo Vallecano competitivo en Primera Iberdrola
El pasado 18 de septiembre el Rayo anunció de manera oficial el fichaje de Ana de Teresa, que procede del Levante B y será su tercera incorporación.


De igual modo, pese a que no se ha hecho aún oficial, están firmadas Yasmin (Madrid CFF) y de Danielle Hayden (Baylor Bears). Todavía quedarían por incorporar entre cinco y siete jugadoras, para completar una plantilla que afronte con garantías una larga temporada. La tarea de encontrar en tan poco tiempo futbolistas buenas, baratas y que se ajusten a las necesidades de Santiso se antoja complicada. Dadas las circunstancias, no es descabellado pensar que el madrileño tendrá que acabar tirando de las jugadoras del filial. En ese sentido, ya se han ejercitado con la primera plantilla jóvenes como Patri Hidalgo, Mónica, Lorena y Carmen.
Club histórico
La temporada no se presenta fácil para el Rayo Vallecano, que empezará la Primera Iberdrola con un menor rodaje y con el lastre psicológico de comenzar tarde. Los dirigentes, además, tienen que lograr hacer una plantilla competitiva en tiempo récord y con la gran mayoría de las jugadoras ya ubicadas. Las madrileñas tienen en sus vitrinas tres Ligas y una Copa, además de una fiel y nutrida afición. Por ello sus problemas resultan, si cabe, más dolorosos de lo normal. Es deseable que el equipo pueda disputar la temporada, al menos, en igualdad de condiciones que el resto.