El Sevilla FC abrió el Ramón Sánchez-Pizjuán para el derbi con el Real Betis Féminas. 12.709 personas vieron el partido en directo. En la ciudad hispalense, los enfrentamientos entre los dos principales equipos de la ciudad siempre son muy emotivos y disputados, pero el club sevillista esta vez echó toda la carne en el asador para que la fiesta futbolística fuera especialmente inolvidable. Ambos conjuntos llegaban a la cita situados en mitad de la tabla. Solo dos puntos los separaban entre ellos, y ninguno ve peligrar este año su permanencia en la Liga Iberdrola. En esas circunstancias, era un buen momento para hacer que el mayor evento del fútbol femenino sevillano dejara más huella de lo normal. El Real Betis Féminas ya jugó como local en el Benito Villamarín en el derbi de la temporada 2018-19. Aquel partido acabó 1-1. Esta vez fue el Sevilla FC el que ejerció de anfitrión en su estadio. El duelo también acabó en empate. Esta vez, el resultado final fue 0-0.


Tablas en el marcador al descanso
Lo normal en los derbis es que los dos equipos salgan al césped con cierto respeto. Siempre hay mucho en juego. En esta ocasión, sin embargo, durante los primeros minutos el balón corrió por todo el campo con cierta soltura. Las llegadas a ambas áreas se sucedieron y tanto Thalmann como Sullastres tuvieron que mostrar su buen nivel. Pese a esto, con el paso de los minutos fue el Real Betis Féminas el que empezó a sentirse más cómodo con el balón en los pies. Tocando la pelota y buscando las bandas, las verdiblancas vieron como, poco a poco, se hacían con la posesión y se acercaban con más frecuencia a la portería sevillista, llegando a crear peligro en varias ocasiones. El acoso bético fue incrementándose hasta que llegó la ocasión más clara. Fue la del penalti fallado por Ángela Sosa. La atacante verdiblanca mandó el balón alto. El conjunto visitante pareció acusarlo durante unos minutos. Luego, volvió a controlar la posesión, pero el marcador no se movió.


El Sevilla FC fue a más
No cambió demasiado el panorama en los inicios del segundo tiempo. A Cristian Toro no debió gustarle demasiado ese panorama, porque hizo tres cambios de golpe en el minuto siete de la reanudación y otro poco después. Fruto de esa revolución, el Sevilla FC empezó a despertar y se hizo con la posesión. Con la pelota, sus acercamientos al área de Thalmann se hicieron más frecuentes. Las sevillistas llevaban muchos minutos agazapadas y habían permitido que el Real Betis Féminas jugara cómodo atrás, y se acercara con cierta frecuencia. Con las sustituciones, el Sevilla FC se vino arriba poco a poco y el final del encuentro fue suyo. Le faltó acierto en los últimos metros, pero sus jugadas cogieron ritmo e intimidaron con frecuencia a las béticas. Al igual que le había sucedido al Real Betis en la primera mitad, el dominio no se tradujo en goles y, con mucha emoción hasta el final, el derbi acabó como había empezado.
Tranquilidad de Sevilla y Betis en la Liga Iberdrola
El reparto de puntos no disgustó a nadie. Pudo ganar el Betis en la primera mitad y el Sevilla en la segunda. Ninguno de los dos está metido en problemas este año en la Liga Iberdrola, por lo que el punto viene bien a ambos. El partido fue muy emocionante. En las gradas, el ambiente, con las dos aficiones mezcladas, fue de guante blanco, y al final todo el mundo pareció quedar contento. Ya pasó el derbi y la próxima semana, tanto béticas como sevillistas se verán las caras con dos huesos. El Real Betis Féminas recibirá a la Real Sociedad y el Sevilla FC rendirá visita a la UDG Tenerife. La Liga Iberdrola encara su recta final y, por lo visto hoy, los dos clubes sevillanos tienen suficientes mimbres como para acabar el campeonato con buenas sensaciones.